La tos ferina es una infección provocada por el Bacilo Pertussis. La tos ferina es una enfermedad contagiosa que se caracteriza por provocar tos violenta e incontrolable durante semanas e incluso meses. El bacilo responsable de la enenfermedad puede encontrarse tanto en la boca como en la nariz y la garganta de una persona infectada. En un primer momento, los síntomas de la tos ferina pueden parecerse a los del resfriado común o a los de...
La tos ferina es una infección provocada por el Bacilo Pertussis. La tos ferina es una enfermedad contagiosa que se caracteriza por provocar tos violenta e incontrolable durante semanas e incluso meses. El bacilo responsable de la enenfermedad puede encontrarse tanto en la boca como en la nariz y la garganta de una persona infectada.
En un primer momento, los síntomas de la tos ferina pueden parecerse a los del resfriado común o a los de una tos seca pero la tos ferina progresa hasta llegar a provocar episodios de tos severa.
En los últimos años asistimos a un resurgimiento de esta enfermedad en adolescentes y adultos debido a la disminución de la inmunidad vacunal y natural con el paso del tiempo.
En Medicinaclara os explicamos en este vídeo todo lo que debéis saber sobre la tos ferina.
El periodo de incubación suele durar de siete a diez días (o incluso prolongarse hasta los 21 días o más). Al principio, los síntomas coinciden con los de un resfriado común con estornudos, mucosidad nasal, fiebre no muy alta y tos. Sin embargo, al cabo de dos semanas, aparecen vigorosos y repetidos ataques de una tos más grave acompañados de mucosidad nasal clara y espesa. El enfermo tose entre cinco y diez veces sin...
El periodo de incubación suele durar de siete a diez días (o incluso prolongarse hasta los 21 días o más).
Al principio, los síntomas coinciden con los de un resfriado común con estornudos, mucosidad nasal, fiebre no muy alta y tos.
Sin embargo, al cabo de dos semanas, aparecen vigorosos y repetidos ataques de una tos más grave acompañados de mucosidad nasal clara y espesa. El enfermo tose entre cinco y diez veces sin poder tomar aliento y cuando la tos acaba, el aire es inhalado con tanta fuerza que provoca un ruido muy característico al entrar en la tráquea. Los accesos de tos pueden llega a ser muy violentos y a menudo asustan porque el rostro se enrojece o se vuelve azulado (cianosis), los ojos parecen salir de las órbitas y las venas del cuello se dilatan. La tos, a veces, se acompaña de vómitos. Estos accesos de tos pueden durar de uno a dos meses y se desencadenan especialmente por la noche.
Los ancianos o los niños parcialmente inmunizados, generalmente, presentan síntomas más leves.
Sin tratamiento, una persona puede transmitir la tos ferina desde el inicio de los síntomas hasta tres semanas después del inicio de los episodios de tos. Con tratamiento antibiótico, este período de contagio se reduce a cinco días.
En los menores de un año es recomendable la hospitalización.
La base del tratamiento son los antibióticos. Los más recomendados son la azitromizina, la eritromicina y la claritromicina. Otra alternativa es el uso del trimetoprim-sulfametoxazol.
Del mismo modo, el tratamiento sintomático consistirá en controlar los accesos de tos y mantener una buena hidratación. También, siempre que sea necesario, se podrá administrar oxígeno y se aspirarán las secreciones.
Para las personas que han estado en contacto con enfermos y no están vacunadas, se recomienda administrar gammaglobulina hiperinmune como prevención.
Cuál es el calendario de vacunación contra la tosferina en los niños En los bebés y en los niños la vacuna contra la tos ferina se administra junto a la de la difteria y el tétanos (DTP) a los 2,4 y 6 meses, entre 15 y 18 meses de edad y una nueva dosis a los niños de entre 4 y 6 años. En cambio, en adolescentes y adultos se administra una dosis única de refuerzo llamada Tdap (tétano, difteria y tos...
En los bebés y en los niños la vacuna contra la tos ferina se administra junto a la de la difteria y el tétanos (DTP) a los 2,4 y 6 meses, entre 15 y 18 meses de edad y una nueva dosis a los niños de entre 4 y 6 años.
En cambio, en adolescentes y adultos se administra una dosis única de refuerzo llamada Tdap (tétano, difteria y tos ferina acelular). La edad preferida para la vacunación sistemática con la vacuna Tdap es desde los 11 a los 12 años de edad. Los adolescentes con edades comprendidas entre 11 y 18 años de edad deben recibir una dosis única de Tdap en lugar de Td (tétanos, difteria) como vacuna de refuerzo contra el tétanos, la difteria y la tos ferina, si ya han completado la serie de vacunas de DTP / DTaP recomendadas para los niños.
El médico que trata la tos ferina es el pediatra. En los casos complicados será necesario la presencia de médicos intensivistas.